domingo, 1 de julio de 2007

¿seremos capaces de acabar con las desigualdades de género en Chile?



En la Pre-historia las mujeres solo fuimos vistas como una cosa, un objeto incluso nos valoraron menos que aun animal, pues el animal servía de ayuda, compañía e inclusive de alimento, en cambio la mujer solo era un simple instrumento sexual el cual el hombre tomaba para satisfacer sus necesidades y luego tiraba o se deshacía de ella como si fuere un trapo viejo.
Luego con el correr de los años la mujer fue agarrando mayor poder por nombrarlo de alguna manera, y fue exigiendo mayor respeto, pero solo en el siglo XVIII fue cuando las mujeres se fueron dando cuenta de la enorme desigualdad en que se encontraban y comenzaron a exigir sus derechos, su obteniendo así su primer logro que fue el derecho a sufragar que les fue concedido en el año 1776 en Nueva Jersey, siendo este abolido posteriormente en el año 1807. Continuando con esta ardua lucha por acabar con las desigualdades de género, en mil ochocientos treinta y ocho, se les permitió votar con las mismas características del hombre (esto fue en las islas Pitcairn), y así comenzaron una serie de países a seguir este ejemplo de desarrollo social, pero no fue sino hasta el año 1935, es decir, casi dos siglos un siglo después, que Chile legitimizó el derecho a sufragar, siendo este solamente para las municipales y recién en 1949 se concedió el derecho a voto a las mujeres para las elecciones presidenciales y parlamentarias. La mayor oposición que existía en Chile para que la mujer pudiese ejercer su derecho a voto fue el supuesto de su “conservadurismo” y esta era por parte de los partidos anticlericales y de Izquierda principalmente.
Así pues las mujeres fueron dejando su huella, demostrando que somos capaces de hacer lo mismo que los hombres, y aunque suene muy cliché, con tacos altos.

Las mujeres sufrimos de una gran marginación en el ámbito laboral, dado que la mayoría de los hombres y algunas tantas mujeres no lograban comprender que la mujer podía ser madre y trabajadora a la vez, teniendo esto hasta el día de hoy, viendo como los empleadores abusan de su poder y dejan sin empleo a una mujer sin empleo por el hecho de estar embarazada, utilizando excusas burdas. ¿Por el hecho de estar en cinta tiene menos habilidades? A tanto llega la ignorancia y temor de algunos que no logran ver que no afectan tanto a la mujer que despiden, sino que afectan al crecimiento de un país en vías de desarrollo.

Por ultimo me referiré a la ley de cuota… ¿es necesaria? Si, a mi pesar si es necesaria ya que aun no estamos completamente educados para soportar que una mujer llegue a una posición de poder por sus ideas, lo vemos con la presidenta, mucha gente del propio Partido Socialista no era capaz de aceptar el hecho de que una mujer tomara el poder del estado casi lo tomaban como mal chiste y ¿Por qué ocurre esto? Esto ocurre porque no educamos, no nos han educado para que la mujer tenga poder y de esto debemos decirlo gran culpa la tienen nuestras propias madres.


Jacqueline Olivos Arenas

1 comentario:

Anónimo dijo...

"Esto ocurre porque no educamos, no nos han educado para que la mujer tenga poder y de esto debemos decirlo gran culpa la tienen nuestras propias madres"...

No sé si entendí bien, pero quede atónita...

Las madres son también MUJERES, por lo que ellas tampoco tienen las herramientas que a nosotras nos han negado en materia de poder y de desenvolvimiento en lo público -excluyendo a las mujeres madres de la elite por cierto-.

Aún así, el hecho que los costos sociales de la maternidad sean asumidos integramente por las mujeres, es sin duda un factor que repercute en la salud de las mujeres y por lo tanto en los costos laborales y sociales, así que no están tan equivocados en asumir que la maternidad es un problema para los empleadores y para el sistema social.

Lo que hay que hacer entonces, es exigir cambios legislativos y culturales, que le confieran a los varones mayor presencia en las tareas del cuidado y de crianza, para que se repartan los costos y para que nuestra salud -mental principlamente- no se vea tan afectada.

Por otra parte, quisiera decirte compañera, que el voto a la mujer, no lo dió "chile", ni tampoco un "presidente" sino que más bien fueron las propias mujeres organizadas -en el movimiento proemancipación de la mujer chilena, movimiento feminista por donde se le mire- las que levantaron y ejercieron esta demanda, apoyadas por el partido comunista, socialista y radical, por lo que es falso plantear que existe una negación por parte de los partidos de izquierda hacia esta intención.

Sin más que saludar la intención de vitrina de este articulo, me despido deseándote buenos vientos!