Por Francesco Maraboli
La concertación en sus inicios la conforma un grupo de partidos políticos que se unen para el plebiscito del año 88, que se oponían a la continuidad de la dictadura militar encabezada por el asesino y dictador Pinochet, por más de una década en el poder. El plebiscito fue convocado de acuerdo a las disposiciones transitorias (27 a 29) de la constitución política de 1980, para decidir “SI” el dictador seguía en el poder hasta 1997 o le decíamos “NO” y volvíamos a la democracia. La concertación logra la victoria al vencer al "SI" en el plebiscito nacional de 1988 por un 55.99% contra un 44.01%. [1]
Tras la vuelta a la democracia, la concertación ha tenido una continuidad en los gobiernos, en primera parte lo fue Patricio Alwyin, después su camarada democratacristiano Eduardo Frei Ruiz-Tagle, luego lo hizo uno de los pilares de la concertación Ricardo Lagos Escobar (ppd) y ahora ultimo con una mujer, socialista y gran líder política la Dra. Michelle Bachelet Jeria. Esto nos demuestra que la concertación es un proyecto exitoso, que tiene sentido en si mismo y es la única forma que la izquierda pueda llegar al poder generando gobernalidad, ya que en esta coalición se encuentran todos los sectores representados, aquellos mas conservadores y católicos, como los pensamientos más progresistas, “revolucionarios” y liberales. Pero es evidente el desgate que ha sufrido tras 17 años de Gobierno pero “ojo” igual se ha avanzado mucho y aquí cito a nuestra actual presidenta “El Progreso que hemos experimentado en estos años de democracia es enorme. Chile es hoy más, mucho mas que en 1990” [2. A principios de los 90 la tasa de pobreza era de 45.1%, con los gobiernos de la concertación a disminuido a menos del 20%, A un 6,6% llegó la tasa de desempleo durante este año. El INE (instituto nacional de estadística) indicó que la cifra representa el resultado más bajo para este período desde 1997, cuando fue de 6,0% [3]. Se han hecho tratados de libre comercio con Estados Unidos, la Unión Europea, etc. Se han construido nuevas carreteras, se han construido nuevos hospitales, se ha plasmado al pueblo de chile de esperanza y de fe en un futuro mejor y algo que es importante y no menor el 30 de agosto como día nacional del detenido desaparecido, pues creemos como partido que el pasado es parte de la construcción del futuro.
Pero me vuelvo a preguntar ¿la concertación esta desgatada?. Creo que los avances que hemos realizado, como gobiernos de una colación de partidos son muchos, sabemos que falta (por que las soluciones generan otras necesidades) pero se ha puesto énfasis en este último. Creo que este desgaste no es malo, pues nos permite replantear ciertos temas y problemas que hay que enfrentar; como la debilidad de los partidos (perdida de sus ideologías y trabajos de base), desde su institucionalidad, pasando por sus fracturas internas, no me refiero a que haya una sola mirada, pero es distinto fraccionarse y quebrar, y por supuesto hasta llegar a la falta de preparación de cuadros políticos. Mientras la derecha prepara y forma a sus nuevos políticos, nosotros ni siquiera somos capaces de poder cuestionarnos estas pequeñeces.
Creo que hoy en día con el gobierno de la actual presidenta, es necesario consolidar la concertación definiendo la estrategia de crecimiento y apuntar a un nuevo norte, donde pasemos a una nueva fase productiva y consolidemos un sistema de protección social. Donde los políticos sirvan a la política y no se sirvan de esta, en donde seamos capaces de darle firmeza a nuestras ideologías partidarias y en donde seamos capaces de saber que la concertación es un proyecto exitoso, que le falta, pero es el que le da gobernabilidad al país. Los brazos están abiertos para las fuerzas políticas que quieran integrar esta coalición que busca, el bienestar del país y de su gente.
Los invito como líderes, como progresistas y como jóvenes a luchar por este proyecto.
Y como dijo Nuestra Querida Presidenta:
El establecimiento de un estado social y democrático de derecho del siglo XXI, sustentado en una economía sólida, sana y moderna, que provee los recursos para expandir la libertades y las oportunidades así como para garantizar integralmente todos sus derechos a todos los chilenos y chilenas.
¡A ese esfuerzo los convoco, ciudadanos y ciudadanas del congreso nacional!. [2]
Citas
1: http://es.wikipedia.org. Concertación de partidos
2: “Mensaje Presidencial”, 21 de mayo del 2007 contigo mejor país.
3: www.ine.cl. Instituto Nacional de estadistica.
Por Francesco Maraboli
1 comentario:
1. Es peligroso, cuando menos, decir que la Concertación tiene sentido por el hecho de haber obtenido 4 presidentes, o que su sentido político proviene de los avances de sus gobiernos y de la cohesión que se logró con la Concertación en el gobierno. Ese es un argumento circular que nos lleva a la conclusión de que el único sentido de la Concertación es sacar presidentes y ser una máquina electoral. Si nosotros aceptamos esa visión, igualando a la Concertación con el Partido Demócrata estadounidense, la derecha va a haber obtenido la más grande victoria sobre nuestras almas desde 1833, cuando Diego Portales acabó con las crisis de juventud de nuestra joven república imponiendo una institucionalidad presidencialista. Creo que la brillantez de Jaime Guzmán está permitiendo que esto sea posible.
2. Creo, tristemente hablando, que la Concertación no tiene mucho más sentido del que ya tuvo, y creo que el cambio de paradigma comenzó a verse con la muerte de Pinochet, el único pegamento real que mantenía unida a la Concertación. Desaparecido Pinochet y reducido el pinochetismo a niveles realmente irrelevantes (así como el higginismo y el carrerismo, que existen aún en nuestra patria en proporciones insignificantes), la Concertación evidencia cada vez más que el único pegamento que puede existir entre los socialdemócratas (la mitad del PS, PRSD), la derecha liberal democrática (la otra mitad del PS, PPD, Expansiva) y la derecha clerical democrática (Democracia Cristiana) es el poder.
3. No hay que preocuparse sin embargo. Aún sin sentido, la Concertación sobrevivirá, como también lo hará la Alianza (en mi esquema, una fusión de la extrema derecha liberal democrática, que es gran parte de RN, con la ultraderecha fascista y totalitaria, que es una mínima parte de RN (Sergio Diez) y la UDI). Su aversión al cambio y la aversión al cambio de los electores, envejecidos, provocará la magia que mantenga pegado a lo impegable.
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